Guía fácil para que comer tofu sea una placer

¿El tofu te parece insípido? Si sigues nuestros consejos, cambiarás de opinión

Si en el post anterior te contábamos todo sobre el tofu, sus propiedades nutricionales y su origen, hoy te queremos dar algunos consejos para que aprendas a disfrutarlo. Pero a disfrutarlo de verdad y no comértelo porque sea sano y ya.

En el caso de que no tengas tiempo de leer el post anterior (aunque deberías porque descubrirás cosas interesantes), vamos a repetir un dato importante. La única manera de asegurarte al 100% de que el tofu que consumes es totalmente seguro para tu salud y no contribuye a perjudicar el medio ambiente es que esté hecho a base de soja de procedencia ecológica.

Así que, a la hora de comprar tu tofu, busca etiquetas como BIO, Orgánico o Ecológico. ¡No te olvides!

Y ahora, vamos a lo que nos ocupa.

¿Cómo se come el tofu?

Algunos de los reparos a la hora de comprar tofu tienen que ver con el desconocimiento a la hora de cocinarlo. ¿Cómo se prepara? ¿Cómo se come? ¿A qué se le echa? Son algunas de las preguntas que surgen a la hora de tener el primer contacto con este alimento tan popular en las dietas veganas y vegetarianas.Aquí tienes unas pinceladas que te servirán de guía para descubrir la cantidad de recetas que puedes llegar a cocinar con tofu.

Tofu en ensalada

El tofu es una manera fácil de añadir proteínas a tus ensaladas o poke bowls. Puedes usarlo crudo, si te gusta la textura del queso fresco o salteado en una sartén para una textura más crujiente.

Si su sabor insípido no te emociona, lo mejor es tirar de tofu ya saborizado o incluso ahumado o, marinarlo en alguna salsa para que coja sabor.

Aquí te dejamos 5 sugerencias para que no caigas en la trampa del típico (y aburrido) aliño de soja:

• - Barbacoa – salsa barbacoa, aceite de oliva, vinagre de manzana, ajo picado, sal, pimentón dulce
• - Teriyaki – aceite de oliva, salsa de soja, vinagre de arroz, ajo y jengibre, ambos picados muy finito o pasados por el rallador y miel o sirope de ágave para darle un toque dulzón.
• - Cilantro – aceite de oliva, zumo de lima y un poco de ralladura de la misma, sal, cilantro picado, ajo picado y sal.
• - Dijon – mostaza de Dijon, aceite de oliva, vinagre de jerez, miel o sirope de ágave, sal y pimienta
• - Mediterráneo – vinagre de Módena o similar, miel, ajo picado, orégano y albahaca (pueden ser frescos o secos), sal y pimienta.

Tofu a la plancha

El tofu a la plancha se puede hacer tanto marinado, como natural y es una manera sana y diferente de incorporar este derivado de la soja a tu dieta.

Tan solo tienes que escurrir el tofu natural, cortarlo en lonchas de alrededor de 1 cm de grosor y ponerlo en una plancha o sartén antiadherente que, previamente, habrás calentado a fuego medio alto con un poco de aceite.

Déjalo unos 2 minutos o hasta que se quede doradito y después dale la vuelta para que se cocine por el otro lado.

Si vas a utilizar tofu que has adobado previamente, no hace falta que utilices aceite, ya que el adobo soltará su jugo y evitará que se pegue.

Tofu frito

La manera ideal para hacer tofu frito es cortarlo en dados. Por lo general, suele rebozarse antes, aunque si prefieres una versión menos calórica, también puedes freírlo tal cual.

Los rebozados pueden hacerse utilizando cualquier tipo de harina, aunque la de maíz es la que le dará un toque más crujiente y, además, te permitirá conseguir una receta libre de gluten.

Para su preparación, por una sartén con aceite al fuego y, cuando esté caliente, echa los cubitos de tofu ya enharinados. Tras freírlos, ponlos en un plato cubierto con papel de cocina para eliminar el exceso de grasa y acompáñalo de la salsa que más te apetezca.

Tofu con verduras

Un plato fácil y nutricionalmente equilibrado, que tendrás listo en unos minutos.

Comienza salteando el tofu marinado en un wok. Cuando esté casi listo, retíralo en un plato y añade en su lugar las verduras que más te gusten.

En el momento que las verduras estén al dente, vuelve a añadir el tofu y un poco de salsa de soja y remueve mientras lo dejas cocinar un par de minutos más.

Acompaña tu salteado de verduras y tofu con arroz o quinoa para un plato completo.

Postres con tofu

El tofu es ideal para hacer postres veganos y resulta perfecto sobre todo para cremas y mousses, aunque si eres un cocinillas también te puedes lanzar a preparar tartas o un delicioso brownie.

La tarta de queso o de chocolate te sorprenderán si nunca antes las has probado.

Otras ideas de recetas con tofu

Aunque hay cientos de recetas, algunas de las maneras más originales de incorporar tofu a tu dieta son las hamburguesas de tofu y los revueltos.

Para ambas recetas tienes que desmigajar el tofu, ya sea usando las manos, ya sea aplastándolo con un tenedor y sofreírlo en la sartén, acompañándolo de tus verduras favoritas.

Para las hamburguesas también tendrás que añadir algún tipo de harina (la de avena o de garbanzos están muy ricas y además son más sanas que la típica de trigo), quinoa o pan rallado y dejar la masa reposar al menos 1 hora en la nevera, antes de darles la forma. De esta manera ganará más consistencia y evitará que se rompan cuando las cocines en la sartén.

¿Se puede congelar el tofu?

La respuesta es SÍ, el tofu se puede congelar. Y no solo para conservarlo durante más tiempo. (Ten en cuenta que una vez abierto, el tofu solo durará en la nevera unos 3-4 días). También para que cambie su consistencia y absorba mejor los adobos o salsas con los que vayas a cocinarlo.

Al meterlo en el congelador, el agua que está dentro del tofu se convierte en cristales de hielo. Cuando lo descongelas, se derriten y el agua sale del tofu, cambiando así su textura por otra más firme y dura, que algunos encuentran más parecida a la carne.

De hecho, congelar y descongelar el tofu se considera una de las mejores maneras de eliminar el exceso de líquido que contiene. Da menos trabajo que el prensado, siempre y cuando seas de los que haga las cosas con antelación.

Seas cual sea el motivo por el que quieras congelarlo, el proceso es sencillo y no afecta a las propiedades nutricionales de este alimento. Tan solo le da una textura más esponjosa y porosa que mejorará tus recetas.

Esto es lo que tienes que hacer:

1. Abre el envoltorio y deshazte del líquido en el que viene el tofu.
2. Córtalo en dados, lonchas o como te dé la gana, dependiendo del plato que quieras cocinar. También puedes dejar el bloque entero, si tienes pensado usarlo todo para una sola receta.
3. Envuélvelo en film transparente o ponlo directamente en una bolsa de congelación o un tupper apto para el congelador.

Conservado de esta manera, el tofu te durará unos 5 meses. Así que, si has congelado varias piezas, acuérdate de ponerles fecha para evitar confusiones.

Para descongelarlo, ponlo en un plato en la nevera y ten mucha paciencia. Este proceso puede durar entre 24 y 48 horas. Aunque si quieres acortar tiempos, también puedes utilizar la función de descongelar del microondas.

En cualquiera de los casos, antes de empezar a cocinar, apriétalo un poco entre papel de cocina para eliminar el líquido restante.

¡Cocínalo y disfruta de un alimento saludable!