LOS MITOS ALIMENTARIOS: LA SOJA:
La soja contiene los nueve aminoácidos esenciales para el organismo.
Es por tanto una buena fuente de proteína vegetal, de vitaminas y de minerales cruciales para reducir el riesgo de sufrir enfermedades crónicas.
La soja, mejor al natural
Ahora bien, esto sólo se puede afirmar cuando lo que se toma es soja en sus formas naturales, como edamame, que son las habas, o productos elaborados con éstas, como tofu o miso. Estos no contienen azúcar añadido, ni grasas, sodio o conservantes.
¿Porque dicen que no hay que consumirla?
Uno de los componentes de la soja, las isoflavonas, similares a los estrógenos, es de lo que más controversia ha creado. En los primeros estudios científicos se relacionaban con el crecimiento de células cancerígenas, y también se creía que afectaban a la fertilidad femenina e interferían en la función de las tiroides.
Las conclusiones han ido cambiando a lo largo de las últimas décadas y una de las investigaciones más serias es la publicada el año pasado en la revista estadounidense Cancer. Determinaba que esta legumbre de origen asiático no representa un riesgo de desarrollar cáncer de mama. Por el contrario, puede relacionarse con un riesgo menor de morir según el estudio, realizado a lo largo de nueve años, desde 1995 a 2005